domingo, 24 de enero de 2016

¿Qué queremos conservar del acebal de Garagüeta?

En el pleno Sistema Ibérico, donde la distribución de la especie se hace escasa y parcheada, y ya casi cerca de su límite sureño, nos encontramos con el Acebal de Garagüeta (Soria). Bajo la figura de protección de Reserva Natural se conserva un bosquete prácticamente monoespecífico de unas 400 ha. de acebo Ilex aquifolium .

Parece que la sucesión ecológica se ha detenido en algún punto intermedio entre los pastizales largamente pastoreados y los bosques de hayas, robles albares o rebollo con rodales de acebo que podría haber en un mundo sin nuestra especie.
Y es que vuelve a ser la mano del hombre la que ha conservado primero los acebos, pero solo los acebos, y la que ha detenido después la sucesión. Eso sí una mano del hombre que buscaba el beneficio propio y que para ello se sirvió del acebo: cuando la deforestación agrícola y ganadera alcanzó su máximo a finales del siglo XIX, principios del XX, estos pequeños rodales de supervivientes ofrecían leña, carbón y estivaderos para el ganado en un mundo de pasto y cultivos. Suficientes motivos para conservarlos.

Hoy vemos un paisaje raro y bello, un bosque secundario que resiste en medio de una ladera totalmente deforestada. Se conserva, pero no sigue los pasos de la sucesión ecológica. Nos gustan los acebos y hemos querido protegerlos en una "foto fija" de un bosquete muy ramoneado, sin regeneración, monoespecífico y cazado*. Me pregunto: ¿Qué queremos conservar en Garagüeta?


* La caza parece seguir siendo prioritaria y capaz de cortar pistas e impedir el tránsito por las sendas del acebal en sábados o domingos de cacería. En fin...